La directora de comunicaciones del candidato Mariano Beltrán está desesperada. El bullying que recibe su hija Rocío desde el colegio la tiene decidida para renunciar de una vez por todas a la campaña de quien fue su amante. 

Pero el problema es que Mariano no la quiere dejar ir, menos ahora que no queda nada para las elecciones. Pero no solo por eso, el candidato sabe que Karen está de vuelta con el fiscal Ramos y ahora se lo hizo saber mostrándole un as bajo la manga. ¿Dejará ir a Karen?