Un joven rubio, de buena presencia y bastante elegante, de nacionalidad chilena, aparentemente, lleva un largo tiempo haciéndose pasar por la realeza. Es por esta razón que el portal español ABC.es, lo acusó de mentir sobre su real identidad. Su nombre es Miguel Ángel Von Und Zu Liechtenstein y da por entendido que es parte de la Casa Principesca Suiza y en un reciente artículo del medio antes mencionado, explicaron los antecedentes de cómo el chileno logra meterse en este cerrado círculo.
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De acuerdo a la publicación, su verdadero nombre es Miguel Pardo Oyarzún, nació en Valdivia en 1984 y tiene solo cuatro meses viviendo en Madrid, donde participa en las más exclusivas fiestas y reuniones que celebra la alta sociedad. Tal como un cuento de hadas, el chileno asegura que su madre se casó cuatro veces y tuvo "una vida amorosa muy intensa, además de una relación con un miembro de la Casa Principesca de Liechtenstein"; al parecer, su padre se desentendió de él así que jamás ha tenido relación directa con su familia paterna, de hecho, jamás ha estado en Liechtenstein, resalta el medio ABC de España.
Ante estas acusaciones, su abogado defendió a través del Twitter al joven y aclaró que el medio se retracta de lo publicado. La misiva publicada por su defensor, niega que Von Und Zu Liechtenstein, haya mentido alguna vez sobre su identidad y si ostenta un título nobiliario.
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Pero la noticia no queda acá, ya que la Casa Principesca de Liechtenstein, desmintió que exista relación entre el joven chileno con la familia real suiza. “Ha llegado a conocimiento de la Casa Principesca de Liechtenstein que el ciudadano chileno Miguel Ángel von und zu Liechtenstein, nacido el 21 de julio de 1984 en Valdivia (Chile), con apellido de soltero Pardo Oyarzún, afirma públicamente ser miembro de la Casa Principesca de Liechtenstein (…) El Ministerio de Asuntos Exteriores desea destacar que Don Miguel Ángel von und zu Liechtenstein no es miembro de la Casa Principesca de Liechtenstein. Tampoco existe ninguna vinculación entre Don Miguel Ángel von und zu Liechtenstein y el Principado de Liechtenstein”.
De comprobarse que no tiene relación con la Casa Principesca de Liechteinstein, Miguel podría incluso ser condenado a un año de cárcel, por “el mal uso del nombre de la Casa Principesca de Liechtenstein o la simulación de pertenencia a la misma”.
